Sólo cuando me amas se me cae esta máscara pulida y mi sonrisa es mía y la luna la luna y estos mismos árboles de ahora este cielo esta luz presencias que se abren hasta el vértigo y acaban de nacer y son eternos y tus ojos también nacen con ellos tu mirada tus labios que al nombrarme me descubren. Sólo cuando te amo sé que no acabo en mí que es tránsito la vida y que la muerte es tránsito y el tiempo un carbúnculo encendido sin ayeres gastados sin futuro.
Claribel Alegría
Égloga III (fragmento)
.... Cerca del Tajo, en soledad amena, de verdes sauces hay una espesura toda de hiedra revestida y llena, que por el tronco va hasta el altura y así la teje arriba y encadena que el sol no halla paso a la verdura; el agua baña el prado con sonido, alegrando la vista y el oído.
.....Con tanta mansedumbre el cristalino Tajo en aquella parte caminaba que pudieran los ojos el camino determinar apenas que llevaba. Peinando sus cabellos de oro fino, una ninfa del agua do moraba la cabeza sacó, y el prado ameno vido de flores y de sombra lleno. ..Moviola el sitio umbroso, el manso viento, el suave olor de aquel florido suelo; las aves en el fresco apartamiento vio descansar del trabajoso vuelo; secaba entonces el terreno aliento el sol, subido en la mitad del cielo; en el silencio sólo se escuchaba un susurro de abejas que sonaba.